El auditorio se llenó de aplausos y emoción la noche del 18 de noviembre, cuando la Asociación de Egresados y Graduados de la Pontificia Universidad Católica del Perú dio inicio a la ceremonia de reconocimiento a cuatro de sus exalumnos más destacados. Entre autoridades universitarias, familiares y miembros de la comunidad, la celebración se convirtió en un espacio para recordar el impacto de la formación humanista y técnica que caracteriza a la PUCP.
El presidente de la Asociación aperturó la ceremonia con palabras que evocaron la historia de la institución y su propósito. «El objetivo es que a través de nuestro aporte dejemos una huella trascendente en nuestro país y en la sociedad en que nos desenvolvemos. La iniciativa de la Fundación Fiat Lux es un ejemplo de nuestro compromiso con las futuras generaciones”, expresó.
Los primeros en tomar la palabra fueron los homenajeados, quienes compartieron recuerdos y reflexiones sobre su paso por la universidad. Maria Celeste Viale recordó sus primeros años en el Teatro Universitario de la PUCP: «Nada era más urgente que mis clases de teatro. Nada más estimulante que escuchar a mi maestro Ricardo Blume. Creo firmemente que lo mejor que te da la vida no son las obras que construyes solo, sino aquellas hechas con los demás.»
Roberto Julio Chang enfatizó la importancia de la comunidad universitaria y de las oportunidades que brinda. «Acepto la invitación como un espacio para celebrar mis lazos con nuestra universidad y para reflexionar sobre lo mucho que ella me dio».
Con una voz llena de gratitud, Alfredo Chang Chong destacó cómo los valores aprendidos en la universidad guiaron su vida profesional y personal. «Este homenaje no solo me emociona, sino que me conecta con los valores que aprendí en la PUCP. Juntos compartimos momentos inolvidables y creamos grandes recuerdos.»
Por su parte, Pedro Repeto Peirano, exalumno vinculado a la PUCP por más de seis décadas, habló de la influencia de la universidad en su carrera. «Durante 65 años he estado asociado a la PUCP como alumno, exalumno y profesor. La sólida formación de ingeniero civil que recibí ha sido la base que me permitió expandir mi actividad profesional. Este reconocimiento es un honor que deseo compartir con mis compañeros de la promoción 1965.»
El rector de la universidad, Dr. Julio del Valle, cerró la ceremonia con palabras de profundo agradecimiento. «Esta ceremonia nos invita a hacer una pausa y mirar con profundidad lo que significa la PUCP. Cada uno de ustedes representa liderazgo, entrega y compromiso, y su trayectoria es un legado hermoso que le podemos dejar a la comunidad y al país.»
Entre aplausos y sonrisas, la ceremonia evidenció cómo nuestra alma máter sigue siendo un espacio que forma no solo profesionales, sino también ciudadanos comprometidos con la sociedad. Con este homenaje, desde la Asociación de Egresados y Graduados reafirmamos nuestra misión de mantener el vínculo, celebrar la excelencia y motivar a futuras generaciones a dejar su huella en el país.
