Revista Brújula #85 Generación PUCP
03/08/2021

Mateo Chiarella Viale reconocido dramaturgo revela su historia en la PUCP

Licenciado en comunicaciones con especialidad de Artes Escénicas de la PUCP en el 2001. Magíster en musicología de la PUCP. Dramaturgo, director de teatro y músico. Autor de numerosas piezas teatrales, como Il Duce, Pequeñas Interrupciones, 1968, Historias en Soul y Búnker. Ha dirigido más de treinta obras como Chicago, Cabaret, El Chico de Oz. Ganador del Premio Iberescena de apoyo a la dramaturgia por la obra Il Duce (2008) y Premio PROART de la PUCP por el ciclo: Leonidas Yerovi: 100 años después (2018).

Vienes de una familia dedicada a las artes, ¿ era definitivo que harías teatro?

No tenía clara mi vocación. Al comienzo postulé a comunicaciones en la UL pero nunca fui a ver mis resultados. Ingresé a la PUCP e hice un año de publicidad y llevé un curso de dramaturgia con Alonso Alegría y pasé a esta especialidad. Me sentía más conectado con el arte. A mi papá no le gustó mucho porque tenía una agencia de publicidad y pensaba que yo iba a seguir lo mismo.  Pero, cuando uno tiene una vocación hace lo que necesita hacer.

¿Fue complicado llevar el legado de tu papá Jorge ‘Coco’ Chiarella al ser un personaje tan importante en un rubro en el que tú te estabas formando?

Yo sentía mucho orgullo. No he sentido un lado competitivo, al contrario, mucha unión de consejo y de guías. He abierto mi propio negocio en la dirección. Yo solo fui haciéndome un nombre. Orgulloso siempre de mi padre y madre por sus logros. 

Mateo, no solo es dramaturgo, sino también director, musicólogo ¿te dedicas a desarrollar varios oficios? 

Si, aplico el refrán “de raza le viene al galgo” porque mi papá era una persona multifacética, mi mamá es multifacética, hacen muchas cosas, periodismo, teatro, etc. Desde ahí, es donde viene un poco mi sensación de que una cosa no parece bastar. 

¿Por qué razón decides iniciar tu carrera profesional en los musicales?

El destino hace cosas. Después de la experiencia de Casa Amarilla, Javier Echevarría me propuso asistir a una obra de teatro musical en preludio donde estuve de asistente. Denisse Dibos, trabajaba en El Principito, una obra que estaba dirigiendo Javier y yo le pedí la sala. Llevé a  la obra a Alberto Ísola, Jorge Chiarella, Carlos Gassols, Paul Martin. Denisse se sorprendió de la calidad de actores que había traído y decidió darme la oportunidad de dirigir: Jesucristo Superstar.  

¿Para ti el teatro es…?

Es un dios. Tiene una sabiduría, una especial forma de llevarte, quererte, tiene justicia. El teatro te acoge y también te alerta, es sabio, da mística, calma y sé que cuando vengan momentos malos ahí estará el teatro.

¿Cuáles son los planes de Mateo Chiarella en los siguientes meses?

Ahorita estoy escribiendo el guión de la celebración del Bicentenario en Canal 7 que va a dirigir Vania Masías y Pepe Corzo.  Viajaré en un mes y regresaré para dirigir una versión grabada de Timón de Atenas de Shakespeare, entre otros planes que tengo para el próximo año.