Pilar Valenzuela estudió la licenciatura en Lingüística y Literatura Hispánica, así como un Diplomado en Antropología en la Pontificia Universidad Católica del Perú. También cuenta con una Maestría y un Doctorado en Lingüística de la Universidad de Oregon. Su tesis doctoral, Transitividad en la Gramática Shipibo-Konibo, recibió el "Premio del Libro Mary R. Haas" otorgado por la Sociedad para el Estudio de las Lenguas Indígenas de las Américas. Actualmente es Profesora Principal en Chapman University en EE.UU. La Lingüista Pilar Valenzuela nos brinda 05 alternativas para contribuir con ellas
Valorizar y sentir orgullo de nuestras lenguas
En el Perú, de acuerdo al Ministerio de Cultura, existen 48 lenguas indígenas, de las cuales 18 están en serio peligro. En nuestra ciudad se habla quechua en 43 distritos . Sin embargo, la discriminación y estigmatización que viven los hablantes de lenguas originarias perdura hasta el día de hoy. Es importante que reconozcamos y respetemos las diferencias culturales y valoricemos el enfoque intercultural.
Hacer prevalecer el marco normativo
Las personas que no hablamos lenguas indígenas debemos reconocer los derechos lingüísticos de los demás y exigir que se garanticen. Hay regulaciones nacionales e internacionales que respaldan los derechos lingüísticos, uno de ellos está en la Constitución Política que reconoce la oficialidad de las lenguas indígenas en el artículo 48. Por tanto, uno mismo aunque no hable una lengua indígena puede exigir que las personas que sí lo hacen sean atendidas en su lengua en los lugares públicos y otros espacios.
Conquistar los altos cargos
Desde el Estado, se debe promover que las autoridades máximas hablen al menos una lengua indígena y como ciudadanos podríamos escuchar los debates políticos y decisiones que afectan al país discutidas también en estas lenguas. De esta manera, no solo se crea representación sino también inclusión.
Adueñarnos de las variedades
Para escribir una lengua no debemos esperar a que esta esté altamente normalizada. La lengua está en constante cambio. Los hablantes debemos sentirnos seguros de experimentar con ella. La lengua es usada por seres humanos y los seres humanos somos capaces de muchas cosas, entre otras de revertir el proceso de pérdida de una lengua.
Los medios de comunicación, potencialmente nuestros mejores aliados
En el castellano peruano, la palabra “alguito” nace a partir de un comercial de un banco en televisión que instaba al público a ahorrar su dinero agregando la frase “ya te estás ganando alguito”. Dada la crisis económica que vivíamos, se añadió el sufijo diminutivo a la palabra “algo” ya que la tasa de interés ofrecida era mínima tomando en consideración el nivel de la inflación. La palabra “alguito” se popularizó en la población y pasó a formar parte de nuestro castellano. Esta anécdota muestra cómo los medios de comunicación pueden ayudar a que ciertas palabras o cambios en general se difundan y se generalicen entre la ciudadanía.